viernes, 31 de julio de 2009

El Vianco que conozco*



Por Lilliam Fondeur**
Conozco a Vianco como lo conocen muchos de sus colegas. Lo he visto luchar por causas por las que ya nadie se arriesga. En la cordillera Central, por ejemplo, -y sólo hay que ir a los parajes de Padre Las Casas, en Azua, para verlo- ha hecho construir dos escuelas y una clínica rural, y ha hecho nombrar médicos, medicas, enfermeras, maestras y maestros, todo eso a base de empeño, lucha y dedicación, y a fuerza de poner sus artículos periodísticos y sus fotografías al servicio de las comunidades más necesitadas.

Mi admiración y mi respeto por este periodista sin igual creció el día que me enteré que una vez las y los campesinos de la sierra estaban acorralados por las aguas de una crecida, en medio de una tormenta, y tras una llamada que recibió de sus amigos, los campesinos, Vianco movió el mundo y logró que las autoridades enviaran un helicóptero para sacar a un grupo de mujeres embarazadas a dar a luz a la ciudad para que no corrieran la misma suerte que una mujer que en un parto se complicó, según él, en esa misma zona.

Cuando un periodista ha enfrentado problemas, Vianco es el primero que llega y el último que se va. Recuerdo aquella ocasión en que el país entero -especialmente los y las periodistas- se enteraron de que una comunicadora de Samanà llamada Erica Guzmánestaba siendo amenazada, y Vianco propuso -y además, encabezó- una caravana de solidaridad para impedir que aquel episodio tuviera un desenlace lamentable.

Escucho con deleite los relatos del tiempo en que era reportero y estoy segura que si yo hubiera sido reportera, hubiera querido ser como él. Vianco Martínez es un periodista cabal. Nunca lo he visto pedir nada para él y siempre que levanta una bandera, es la bandera de las y los otros. Vianco tiene una dignidad a prueba de balas con la que nadie nunca ha podido.

Ayer oí a una comunicadora decir que todos los periodistas de su tiempo han querido ser tan aguerridos como él. Creo que por eso lo respetan sus colegas y lo quieren sus amistades. Ese es el Vianco Martínez que tengo el honor de conocer. Y ese es el hombre que fue ultrajado en el Teatro Nacional por unos espalderos insignificantes que creyeron más en el poder de sus pistolas y de la fuerza bruta, que en la dignidad de un ser humano.

Es verdad que nos hemos vuelto indolentes frente al abuso y la injusticia, y que muchas veces el poder del dinero se ha impuesto frente a la dignidad de los seres humanos. Pero esto que le ha pasado a Vianco Martínez, definitivamente, no lo podemos permitir.

Si Vianco pierde esta pelea -sea porque no encuentre la solidaridad suficiente de sus compañeros y sus amigos o porque la justicia se enrede en tecnicismos y no falle a su favor- este país se hará un poquitico más inhabitable, y ejercer el periodismo se convertirá en una verdadera humillación.

Creo que llegó el momento de decirle NO a la violencia, a la forma violenta de resolver las cosas y demostrarle a Vianco que lo queremos tal y como es, y que este sigue siendo un país a la medida de sus sueños.

*El artículo "El Vianco que conozco" es el quinto de una serie que haremos en este blog, a manera de conteo regresivo hasta el 23 de agosto cuando se cumple un año del atropello contra Vianco Martínez. El primero de estos textos lo hizo Edwin Ruiz y está aquí con el título Los hilos del poder y la agresión contra Vianco Martínez.

** Lilliam Fondeur es ginecóloga. Recientemente publicó el libro "Las hijas de nadie" y es autora de la columna "Ginecología actualizada" en el vespertino El Nacional y del blog http://mujersapiens.blogspot.com/

domingo, 26 de julio de 2009

Celebrar la "rapidez" de la justicia*


Por Maher Ortiz**

Cuando se cumplieron tres meses de "lo que sucedió en el Teatro" un grupo de periodistas, trabajadores de la prensa y personas indignadas le enviaron al fiscal del Distrito Nacional una carta en la que se reclamaba justicia en el caso de Vianco Martínez contra Rafael Emilio Vargas y Josué Vargas, espalderos de Saymon Díaz.

Para celebrar la "celeridad y efectividad" de la justicia, hoy deberíamos publicar la misiva destinada a Alejandro Moscoso Segarra, con sus decenas de firmas de gente que se preocupó por la lentitud de un proceso judicial en un caso de violación de los derechos a buscar y a divulgar información.
Como no ha habido una respuesta efectiva, solo haría falta cambiarle las fechas a la carta para adecuarla al contexto de hace ocho meses.

Celebremos sí. Hagamos una fiesta y brindemos por el sistema. Brindemos por los cientos de casos que, junto al de Vianco, se fermentan en los archivos de la Fiscalía del Distrito Nacional.
Pronto será tiempo de comprar un bizcocho para conmemorar el primer año del atropello que sufrió nuestro colega la noche del 23 de agosto de 2008, en un hecho tan terrible y condenable que algunos preferimos nombrar como "Lo que sucedió en el Teatro".

Ahora mis colegas y yo nos preguntamos: ¿Debemos esperar a que se aplique justicia o debemos, de verdad, cambiar la fecha a la carta?

*El artículo "Celebrar la 'rapidez' de la justicia" es el cuarto de una serie que haremos en este blog, a manera de conteo regresivo hasta el 23 de agosto cuando se cumple un año del atropello contra Vianco Martínez. El primero de estos textos lo hizo Edwin Ruiz y está aquí con el título Los hilos del poder y la agresión contra Vianco Martínez.
** Maher Ortiz es periodista. En la actualidad es conductora y productora del programa "Lo mejor de la mañana", que se transmite por Radio Universal.

La carta


Santo Domingo, 30 de noviembre de 2008 Dr. Alejandro Moscoso SegarraProcurador Fiscal del DNSu Despacho Distinguido Magistrado: Nuevamente nos dirigimos a usted para reiterarle nuestro interés en el proceso judicial que lleva a cabo en contra de sus agresores nuestro colega Vianco Martinez, que ya lleva tres meses sin una decisión satisfactoria.

Vianco Martinez fue agredido sin razón por los espalderos del controversial empresario artístico Saymon Díaz el 23 de agosto, mientras se preparaba para realizar una entrevista periodística al cantautor español Pedro Guerra.

Si se hace necesario refrescar la imagen de aquella noche, le recordamos que Vianco fue levantado violentamente de la silla que ocupaba en la Sala Principal del Teatro Nacional, tomado con violencia por el cuello y con los brazos retorcidos y en medio de insultos, fue arrastrado desde ese lugar hasta el parqueo situado en la calle Pedro Henríquez Ureña, todo eso delante de la gente que llegaba al concierto del citado artista. Es decir, nuestro colega Vianco Martinez recibió esa noche el trato de un delincuente común, y no de cualquier delincuente! El periodismo dominicano, que durante años Vianco ha representando dignamente, se siente agredido y ultrajado con esa acción decadente.

Por tanto, la lucha de Vianco porque se haga justicia es la lucha de todos los periodistas de la República Dominicana. Señor Fiscal, usted que es un hombre de la ley sabe que el que agrede a una persona se pone al margen de ella y sabe también lo que significa para una sociedad democrática que los victimarios sean premiados con la indiferencia.

El periodismo dominicano necesita una satisfacción. Por tanto, le pide fervientemente, encarecidamente, vehementemente que pase a la historia con una sanción ejemplar a los atacantes de nuestro colega. Cuando eso suceda el periodismo se lo agradecerá. Después que agredieron a Vianco, los nombrados Rafael Emilio Vargas y Josué Vargas, de la compañía Centauro Security Group, volvieron a reincidir en acciones de fuerza, en el concierto del artista Luis Miguel, según consta en el periódico del día ….. y en el despacho de la agencia EFE de ese mismo día.

¡Que más hay que esperar para disponer las sanciones correspondientes a unas personas que se han puesto al margen de la ley y que han demostrado ser reincidentes en acciones de violencia! Distinguido Magistrado, a tres meses de que se cometió la agresión contra Vianco Martinez y en el a todos los periodistas de la República Dominicana, aun seguimos esperando las acciones de la Fiscalía que lleven a las sanciones correspondientes.

sábado, 25 de julio de 2009

¡Porque Vianco somos todos!*



Por Yomaira del Rosario**
¡Perdemos tanto callando!

... y nuestro lenguaje, el que a veces vendemos, se hace mudo entre falsas palabras y a veces grita tanto ese silencio... cuántos no quisieran hablar, gritar las injusticias, condenar con una enfurecida palabra, los abusos, lo inmoral; pero no, no pueden...

Y de nosotros qué? Esperan el silencio complaciente o la defensa a raja tablas como saben hacerla aquellos a quienes poco duele nuestra carrera, ésta a la que amamos y por la que respiramos...?

Elevo mi voz en apoyo a Vianco Martínez, a quien conocí en un encuentro taller de Copresida, en Constanza; historia que, aunque en tiempos disímiles, comparto con el periodista Alexéi Tellerías, que también le conoció en un evento similar y con quien además comparto lo que relata en su blog Catarsis, http://catarsisdiaria.wordpress.com/2008/09/22/vianco-me-llamo-ese-dia/ relativo al abuso cometido contra el periodista y escritor Vianco Martínez por los espalderos del empresario artístico Saymon Díaz, quienes lo agredieron y maltrataron cobardemente bajo el mísero resguardo de un poder adinerado y además lo sacaron a empujones del Teatro Nacional, momentos en que intentaba hacer su trabajo.

De esta burda agresión, como también la llamamos, hace casi un año, justo lo será el 23 de agosto, pero lo que realmente esperamos es que no se siga imponiendo por encima de los valores, de la verdad, de la justicia, el poder que otros ostentan y con lo cual pretenden arropar, mezquinamente, lo que ante la vista de todo un mundo, grita por no quedar trastornada, corroída, inútil, desecha, LA VERDAD!

Y la verdad debe ser verdad, solo verdad y no más que verdad.

A los que esperan que el olvido seque amargamente este agravio contra Vianco, quedarán frustrados en su espera... solo esperen.

A Vianco, que aunque poco, orgullosamente conozco, lo traspasé en sus adentros con sólo leer una de esas historias de camino, como bien les llama, que hizo llegar a mí y supe entonces cuán especial es... a Vianco le sobran amigos, que se sepa! le sobran también historias y han de quedar empañadas si nos arropa el fatal silencio... ha de morir la palabra, si nos arropa el silencio.
http://apoyemosavianco.blogspot.com/

Porque sí, porque Vianco somos todos.

*El artículo "¡Porque Vianco somos todos!" es el tercero de una serie que haremos en este blog, a manera de conteo regresivo hasta el 23 de agosto cuando se cumple un año del atropello contra Vianco Martínez. El primero de estos textos lo hizo Edwin Ruiz y está aquí con el título Los hilos del poder y la agresión contra Vianco Martínez.
**Yomaira del Rosario es periodista de Teleantillas en Santiago. Ella pertenece a la nueva generación de periodistas de la Ciudad Corazón. Su blog es http://yomy-elblogdeldesahogo.blogspot.com/

viernes, 24 de julio de 2009

¿Y si un día…?*

Por Lissette Rojas**

¿Y sin un día unos espalderos decidieran, unilateralmente, que no se puede cubrir el día a día del Palacio Nacional y expulsaran a empujones y arrastraran fuera a todos los reporteros?

¿Y si un día esos mismos hombres, amparándose en la impunidad que dan las relaciones con el poder, prohibieran hacer fotos y golpearan a todos los camarógrafos y fotógrafos que cubren el Congreso Nacional?

¿Y si un día unos espalderos arrogantes amenazaran con pistolas a los cronistas deportivos que se dispusieran a cubrir un juego Águilas contra Licey en el estadio Cibao?

¿Y sin un día unos ‘ningunos’ perversos decretaran, desde el podium de la arbitrariedad, que está prohibido hacer fotos o hablar con las madres de las víctimas de una huelga?

¿Y si un día unos porteros indolentes de un hospital, empujan a las reporteras de salud que tratan de conseguir una información sobre un brote epidemiológico?

¿Y si un día unos espalderos empujan fuertemente contra una pared a unas periodistas de sociales que se acercaron ‘demasiado’ para pedirle el nombre a una dama?

¿Y si un día seres serviles persiguieran y entraran en casa de unas periodistas por investigar la vida de un senador acusado de corrupción?

¿Y si un día unos individuos atrevidos golpearan a un reportero por hacer su labor en las afueras de un consulado?

¿Y si un día el Presidente del país empieza a llamar cortésmente a los directores de medio cada vez que surja un tema polémico?

¿Y si un día unos espalderos llegaran en la noche a la redacción de un periódico y le pidieran ‘cortésmente’ al director que los acompañe porque el 'jefe' o 'el número uno' necesita hacerle unas preguntas?

¿Y si un día lo que le sucedió a Vianco Martínez me pasa a mí o a ti?

¿Y si un día nos damos cuenta de que nuestras libretas, nuestras cámaras y nuestras grabadoras no nos hacen inmunes?

¿Y si te digo que ese día va llegando con sutileza? ¿Y si te digo que todos esos agravios podrían pasar silenciosos si no los contamos?

El atropello y la desconsideración que cometieron los espalderos de Saymond Díaz contra Vianco Martínez fue un intento de poner de rodillas al ejercicio del periodismo dominicano. Pero no lograron ni lo lograrán jamás. Harán falta otras fuerzas distintas a las de la complicidad para humillar a un periodismo que ha decidio estar de pie.
Entre los serios nadie se arrodilla. Los periodistas y trabajadores que no tenemos precio estamos unidos para que nunca jamás unos ningunos con poder abusen y vilipendien a uno de nosotros.
¿Y sin un día unos espalderos, arbitrarios y malévolos, descubrieran junto a quienes los amparan que hacen falta otros poderes por inventar para acallar los abusos contra la sociedad y contra los periodistas?


*Este artículo es el segundo de una serie que haremos en este blog, a manera de conteo regresivo hasta el 23 de agosto cuando se cumple un año del atropello contra Vianco Martínez. Esta es nuestra forma de protesta contra el silencio de la justicia ¿o debemos decir la justicia del silencio? El primero de estos textos lo hizo Edwin Ruiz y está aquí con el título Los hilos del poder y la agresión contra Vianco Martínez
**Lissette Rojas es periodista de revista del Semanario Clave.

BASTA DE MALOS TRATOS A LA PRENSA


Al día siguiente del atropello contra Vianco Martínez, el periodista Samir Saba* plasmó en su blog la indignación que le produjo enterarse del tratamiento que había recibido un colega suyo. Si quieres ver el texto en su sitio: http://samirsaba.wordpress.com/2008/08/24/basta-de-malos-tratos-a-la-prensa/


Anoche me enteré de un hecho que, además de injusto, es denigrante. Yulendys Jorge me notificó que el periodista y escritor Vianco Martínez había sido sacado a “patadas y empujones” del Teatro Nacional por el equipo de seguridad del concierto de Pedro Guerra.

La historia va así: Unas horas antes del show que produce en el país Saymon Díaz, Vianco había acordado con el músico y su esposa María que le concederían una entrevista previa al último ensayo.
Llegado el momento, Vianco le recordó el compromiso a María, y ésta a su vez le pidió que le esperara unos minutos más a que Guerra terminara de grabar una entrevista para televisión con Luz García. Es entonces cuando sale de la nada Rafael Vargas -un agente de seguridad que, según investigaciones, preside la compañía Centauro Security Group- exigiéndole salir de allí, y tirando contra el suelo su grabadora y celular. A seguidas, otro “seguridad” se encargó de romperle el cuestionario que había preparado para su encuentro con el intérprete, lo tomó por el cuello, le retorció el brazo derecho y lo arrastró -como si fuera un animal- hasta el área de parqueo donde, como si fuera poco, le propinó varias patadas. Un acto que, sin lugar a dudas, es brutal, sucio, bajo, innecesario, inhumano. Punto.

Lamento sobremanera que se haya tratado de un evento organizado por alguien que aprecio, pero no me podía quedar callado. Es verdaderamente avergonzante que sigamos siendo víctimas de atropellos semejantes. Ya es hora de tomar cartas en el asunto. No sólo maltrataron de la peor manera a un periodista que sólo hacía su trabajo, sino a un ser íntegro, lo que es aún peor. No hay derecho.

Hace unos momentos, Yulendys me llamó desde el Palacio de la Policía Nacional donde se encontraba junto a Vianco poniendo la querella correspondiente. Y espero sinceramente que se haga justicia en este caso que ya se está volviendo costumbre.

Desde aquí me solidarizo plenamente con Vianco, y exhorto a todos los colegas comunicadores y muy especialmente a todos aquellos ciudadanos que día tras día se dan su vuelta por esta bitácora, a alzar sus voces de protesta. A unirse a la causa.
*Samir Saba es un periodista joven con una larga trayectoria. Ha trabajado en Listín Diario y El Caribe. Su labor en radio también es reconocida. En la actualidad tiene el programa La otra nota, que se transmite a las siete de la noche por la 95.7, La nota diferente.

Felap reclama una sanción ejemplar para los agresores de Vianco Martinez



Texto publicado hace diez meses en el Diario Digital RD*, cuyo lema es "Tu conexión con la verdad". El enlace es: http://www.diariodigital.com.do/articulo,32539,html


LIBERTAD DE PRENSA
Felap reclama una sanción ejemplar para los agresores de Vianco MartinezLos agresores eran espalderos de un empresario artistico.Por Servicios de Noticias Dario DigitalRD.Com
SANTO DOMINGO, 2 de septiembre de 2008.-La Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP) reclamó de las autoridades judiciales dominicanas la sanción correspondiente contra los sujetos que agredieron al periodista Vianco Martínez, en momentos en que aguardaba para realizar una entrevista al cantautor español Pedro Guerra en el Teatro Nacional en Santo Domingo.


Nelson del Castillo, Secretario General Adjunto de la FELAP, expresó que no debe quedar impune la violencia con la cual Rafael Vargas y Josué Vargas procedieron contra el periodista Vianco Martínez en una instalación pública.


Los individuos, identificados como guardaespaldas contratados por el productor artístico Saymon Díaz para dar protección al cantante canario Pedro Guerra, al parecer se consideran con derecho a actuar como “matones”, según la versión del incidente que ha recibido la FELAP, dijo Del Castillo en declaraciones escritas emitidas desde Puerto Rico.


Las explicaciones ofrecidas por el empresario artístico en el sentido de que los sujetos “sacaron forzosamente” al periodista Vianco Martínez del Teatro Nacional es evidencia de que hubo exceso de fuerza en el proceder en la instalación pública, en la que cualquier comunicador social debe ser tratado con la debida deferencia, precisó el Secretario General Adjunto de la FELAP.


Nelson del Castillo insistió en que las autoridades judiciales deben aplicar una sanción ejemplar contra los acusados por la agresión al periodista Vianco Martínez, porque es de la única forma en que se puede frenar la prepotencia de la que se revisten ciertos personajes con ínfulas de poder.


El integrante del Secretariado de la FELAP argumentó que hay que contener la prepotencia prevaleciente de ciertos individuos que, so color de autoridad, la emprenden sin miramientos contra los periodistas, como todo parece indicar ha ocurrido en el caso de Vianco Martínez.


*Diario Digital RD es dirigido por el periodista José Tejada Gómez. Su dirección: http://www.diariodigital.com.do/

Vianco me llamó ese día


El 22 de septiembre de 2008, un mes después del agravio que los espalderos de Saymond Díaz cometieron contra Vianco, el periodista Alexéi Tellerias* publicó en su blog un artículo intitulado
"Vianco me llamó ese día".

Aquí reproducimos un fragmento de la solidaridad de Alexéi con un periodista con el que se ha sentido "orgulloso de compartir profesión". La versión completa: está en http://catarsisdiaria.wordpress.com/2008/09/22/vianco-me-llamo-ese-dia/

Vianco llamó y -entre otras cosas que no vienen al caso- estuvimos comentando sobre el Festival de Poesía en la Montaña. Me dijo que él no se considera poeta, pero que iba “a escuchar a los que realmente saben de eso”. Que, aunque él siempre había tratado de incluir rasgos de poesía en sus crónicas, mejor se iba a un rinconcito a disfrutárselo completo. Le dije que nos veríamos allá y que estaba contento de contar con su presencia durante el performance que iba a hacer.
Eso fue el mismo día que ocurrió lo que ya todos conocemos. Esa noche, a Vianco Martínez se le vejó por ejercer su trabajo. No tengo que entrar en detalles, puesto que mucho se ha hablado del asunto.
Esa noche quedó marcado que Vianco no pudiese ir la semana siguiente a Jarabacoa y empezase una jornada digna de los salmones (por aquello de nadar contra corriente) en defensa suya y de nuestra clase.

*Alexéi Tellerías es periodista de la sección La Vida, del periódico Listín Diario

Vianco Martínez: "símbolo viviente del periodismo dominicano"


Artículo publicado hace siete meses por Carlos Mejía*, en el blog Imágenes Dominicanas**. El enlace del sitio donde se publicó originalmente es:http://www.imagenesdominicanas.com/2008/12/vianco-martnez-smbolo-viviente-del.html


Por Carlos Mejía*
Hablar de Vianco Martínez, es hablar del decoro, de la honestidad, de la honradez, y del trabajo. Es hablar más de la cuenta, porque todo se ha dicho, lo que no se ha hecho.
Vianco representa un símbolo viviente en el periodismo dominicano de este tiempo, y engalana, con voz proverbial, lo más alto en la Etica del Periodista.Trabajador a tiempo completo, nacionalista, y voy más lejos, internacionalista como El Che. Me quito el sombrero ante el y siento el orgullo, de por lo menos estar en la fila de sus muchos amigos, por lo menos ser el ultimo o como dirían en la pelota "el cargador de bates", o el pegao.
Vianco es el Baluarte, la mariposa, que escribe, el ojo visor que ve a través de un lente, quien ve mas allá de los que otros no ven. No es casual que todo el mundo diga, de las virtudes de este ser tan especial, que sabe cantarle a la patria, al amor, porque no a la poesía, al niño, al viejo, al pobre, al rico, al malo, y al bueno.
La dimensión de este hombre, hijo de una familia de profesionales y claro de su madre, que supo empuñar, con tesón, y sus manos de amor, el corazón, para criar a sus hijos, para contar hoy con el orgullo, y la satisfacción.La sociedad dominicana, merece no un Vianco, mas Viancos, que le canten a su patria, con la poesía, con los hechos, con bondad. Una patria podrida, por los políticos y porque no por la misma sociedad un tanto ignorante e inculta una gran parte, por muchos que la hacen así, merece algo mas, merece a Vianco.Hombres que suban como el, a las lomas en los campos de Quisqueya, a retratar la pobreza, el sufrimiento y la amabilidad del campesino; los surcos de la tierra, el trillar de los pájaros y las cascadas de los ríos, la pendiente en las montañas.
Otros no lo saben, que Vianco huele a café de pilón, a maíz tostado, a yerba del campo, a brisa de pueblo, a flor de primavera y leña mojada. Hay un pueblo que pide a muchos Viancos, que puedan expresarse y decir verdades, como la poesía de Juan de Dios Peza, "Verdades Amargas".Hay una frase de Federico Henríquez y Carvajal: "Solo aplaudimos las virtudes de los grandes hombres, cuando hoy son sus grandes muertos". Soy de los que cree, ciegamente, que todos debemos estar alineados, en la trinchera con Vianco, porque el orgullo, y la dignidad, que se debe sentir, son más grandes que el oro y la plata. Facundo Cabral Repite de San Agustín, que cuando tu llegues al cielo, Dios no te va a preguntar que hiciste con tu dinero, sino que hiciste con tu alegría, la alegría de Vianco.

El fotoreporterismo, se engalana, teniendo entre sus filas a este soldado del lente, mira y ve más que el periodista mismo que lleva dentro.Las palabras sobran, lo que no sobra es Vianco, me quito la cámara como trabajador del lente, y la paso a este hombre no solo por lo que me han contado, sino por lo vivido. Algún día lloverá sobre el verdor y pasara la vida, como diría José Angel Bueza, pero no pasara Vianco, una pagina en la historia de este país le espera; hasta pronto amigos."Puede una gota de lodo, sobre un diamante, caer, puede también de ese modo,su fulgor obscurecer, pero aunque el diamante, todo se encuentre de fango lleno, el valor que lo hace bueno, no ha de perder ni un instante y ha de ser siempre Diamante, por mas que lo manche el cieno".

*Carlos Mejía es fotorreportero del periódico El Caribe
**El blog Imágenes Dominicanas es propiedad del reportero gráfico Reynaldo Brito

VIANCO MARTINEZ: UNA AGRESION PERMITIDA


Fragmento de un artículo publicado hace siete meses en el blog Historia Actual*. Lo puedes encontrar completo en: http://historiactual.blogspot.com/2008/12/vianco-martinez-una-agresion-permitida.html


En el circo de la realidad
hay un desprecio por la realidad,
un desencuentro con la realidad,
todo se compra, en realidad.
Inversiones en publicidad,
decepciones en capacidad,
intenciones de complicidad grosera.
Pasen y vean…


EL CIRCO DE LA REALIDAD / PEDRO GUERRA


El caso de la agresión al periodista dominicano Vianco Martínez, por parte de los espalderos del empresario a cargo del concierto del cantautor Pedro Guerra, lo referimos hace algunos meses. Esa circunstancia nos permitió conocer más a fondo un personaje con quien ya habíamos entablado amistad y afinidad, en razón de la lectura de algunos de sus escritos.


Este comunicador social tiene la virtud de no detenerse en los aspectos noticiosos que llenan las primeras páginas de los periódicos, sino por el contrario, rescatar la historia de los hombres y mujeres sencillos que no suelen tener historia de interés para los grandes medios y los capitales que están detrás de ellos.


LOS ESPALDEROS

Hablan los espalderos de Saymon Díaz.

Josué Vargas: “No tengo que arrepentirme de nada”Rafael Emilio Vargas:“No fui a las citacionespor mi trabajo en la seguridad del Estado”

Vianco Martínez, como bien lo registran amigos y colegas, ha dedicado su quehacer profesional y, evidentemente, su hacer de vida, a quienes no tienen voz, ni historia, ni cuento que narrar. Pero que son los imprescindibles, los que laboran en loa campos, los que sobreviven la soledad de las sierras deshabitadas, los que siembran frutos, paren hijos, laboran sin cesar y construyen las alegrías sencillas del hombre, aún en medio de sus carencias, necesidades y atropellos. Son los olvidados, negados o silenciados, con los que Vianco establece una relación fraternal, en la medida en que contribuye a levantar una escuela aquí, a salvar a un niño allá, a hacer del parto un arribo menos traumático.Es el espejo inverso de una sociedad preocupada por los resplandores de los oropeles, por el brillo fatuo de lo que no tiene valor sino en el mercado de los que todo lo tienen.


Es la noción de que existimos en la hazaña de los días vividos, sin otra celebración que la vida misma.Y cosa curiosa, cuando le ocurre el brutal incidente mediante el cual los espalderos de un empresario/comerciante de ‘arte’, lo agreden con una violencia inusitada, Vianco esta en la tarea de entrevistar un cantautor que dice lo siguiente, en su canción titulada Niña:Quizá te busquenporque naciste,quizá te midan por mujer,quizá te acosenporque creciste,quizá te odien por mujer,pero no dejesde ser la niñaque abrazatodo lo que hay en si,pero no dejes de ver el mundocomo un espacio por compartir.


¿Tendrá conciencia Pedro Guerra que la niña de que habla, es exactamente la misma que Vianco va a buscar para que pueda ser parida en el hospital mas cercano, la que recoge para que la asistan cuando no hay medicinas, la que busca que le construyan escuelas para que aprenda, esa que ‘abraza todo lo que hay en sí’ y la que ve ‘el mundo como un espacio para compartir’?Esta es la paradoja y a la vez la tragedia.


¿Es posible que esa canción termine custodiada por matones y espalderos? Esta pregunta va para Pedro Guerra, a quien no hacemos responsable directo de los atropellos de su empresario, pero a quien le solicitamos tome parte en el asunto, porque no hacerlo lo situaría muy lejos del contenido de sus canciones y más cerca del circo-comercio en el que se ha convertido la canción.


En todo caso, queremos dar registro de esta historia, nada inusual, ni diferente a la que se vive cada día en los expaíses del atropello, pero que requiere ser divulgada, recordada, porque en cada injusticia que se comete, en cada caso en que la legalidad se acomoda a los intereses de los dueños, más que a la verdad de lo que acontece, es necesario dar una batalla por todas las injusticias, por todos los atropellos, por todos los niños, que carecen de canción, de risa y de escuelas. Saludos Vianco!!!! MSInvitamos a leer los siguientes reportajes:http://eldebateeconomico.blogspot.com/2008/12/apoyo-vianco-martinezlibertad-de.html
http://www.clavedigital.com/App_Pages/opinion/Firmas.aspx?Id_Articulo=13219&Id_ClassArticulista=71
http://imagenbrillante.blogspot.com/2008/12/vianco-martnez-smbolo-viviente-del.html
*El blog Historia Actual es autoría de Agustín Blanco Muñoz, Mery Sananes, Danielita Barrolleta.
Cátedra Pío Tamayo/ Centro de Estudios de Historia Actual/ IIES / FACES/ Universidad Central de Venezuela. Su mail es historiactual@gmail.com

Los órganos de seguridad deben dar una explicación




Un artículo de Roberto Sánchez* publicado hace siete meses en Clave Digital. Para ver el texto en su sitio original: http://www.clavedigital.com/App_Pages/opinion/Firmas.aspx?Id_Articulo=13219&Id_ClassArticulista=71

Roberto Sánchez*
lunes, 15 de diciembre de 2008, 08:41 p.m.
Los órganos de Seguridad del Estado deben dar una explicación
Uno de los agresores del periodista Vianco Martínez anunció en plena audiencia celebrada el pasado 9 de diciembre que había hecho caso omiso a cuatro citaciones de la Fiscalía por su trabajo en la Seguridad del Estado.
Es decir, el personaje entiende que trabajar con la Seguridad del Estado le da el privilegio de no hacer caso a la ley y desdeñar la justicia.
El Sr. Rafael Emilio Vargas fue el espaldero de la infeliz ocurrencia que pone en entredicho a esos órganos de seguridad del Estado.
El pasado 23 de agosto los señores Rafael Emilio Vargas y Josué Vargas, actuando al servicio del empresario artístico Saymon Díaz, atropellaron en pleno Teatro Nacional y sacaron violentamente del centro de espectáculos al mencionado comunicador, mientras éste esperaba por una entrevista que le había prometido el cantautor Pedro Guerra.
Los espalderos no escucharon explicaciones, ni siquiera intentaron indagar con el artista. En un derroche de prepotencia la emprendieron contra el comunicador que realizaba su trabajo.
La prepotencia exhibida esa noche no fue un hecho aislado ya que ha vuelto a reiterarse en varias ocasiones en abierto desafío al ministerio público y a la ley.
Tres ayudantes fiscales han actuado en el caso en seguimiento a la querella interpuesta por el periodista contra los agresores, sin lograr que comparezcan a audiencia.
Cinco citaciones a audiencias y a todas habían hecho caso omiso, excepto a la última en la cual el magistrado fiscal, Carlos Manuel Hernández, de la Unidad de Decisión Temprana, al parecer hizo sentir su autoridad.
Aún en esa última el Sr. Rafael Vargas llegó con dos horas de retraso.
El otro espaldero agresor no se quedó atrás en el espectáculo de prepotencia que escenificaron en la audiencia que tenía pretensión de ser conciliatoria. A la solicitud del magistrado de que se disculpara respondió: “no tengo que arrepentirme de nada”
Cuesta creer que tal exhibición de prepotencia y de abierto desafío a la justicia sea el producto de la ignorancia o la irracionalidad. Alguna garantía de impunidad, o la creencia de ella, es la única razón posible para un proceder tan altanero.
Si esos órganos de seguridad del Estado no aclaran su situación frente a estos personajes, entonces su credibilidad y autoridad quedará en franco y justificado cuestionamiento. En particular la Policía, la cual ya había sido mencionada por la abogada de los acusados como la institución donde uno de ello es “instructor”.
La historia ha demostrado que los pueblos no pueden permitir ni dejar pasar por alto ningún tipo de abuso ni de injusticia.
¿A cuantos habrán atropellado estos energúmenos de manera impune?
¿A cuantos más atropellarán si la justicia no funciona, si la sociedad se hace de la vista gorda o si algún poder oculto logra un nuevo suceso de impunidad?
Por suerte para todos que estos profesionales del abuso ahora encontraron un experimentado luchador por las libertades y los derechos, que sabe cuales son los suyos, sabe ejercerlos y defenderlos, y que no se va a dejar avasallar.
En especial los periodistas, expuestos constantemente a situaciones de este tipo, deben ver en este caso una probabilidad para cualquiera de ellos, y en el castigo ejemplar un acto preventivo para que no vuelva a ocurrir.
Pero no solo los periodistas, toda la sociedad debe cerrar filas, permanecer vigilante y no aceptar que prevalezca la impunidad, se imponga un acto de denegación de justicia y triunfe la prepotencia y el atropello.



*Roberto Sánchez es ingeniero agrónomo

La FELAP publica las agresiones contra periodistas dominicanos


felap*.info, Santo Domingomartes, 02 de septiembre de 2008


El Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), por mandato de su asamblea, denunció que se está registrando en el país una serie de acciones contra la labor periodística, resaltando los casos de Alicia Ortega, Vianco Martínez y el corresponsal en Hato Mayor, Manuel Antonio Vega.

Una declaración emitida por la Asamblea General del CDP analiza que estos tres casos indican que el ejercicio de un periodismo responsable y comprometido socialmente todavía no es aceptado en el rejuego de las ideas, contrastando con las directrices públicas que emiten los dirigentes de los tres poderes del Estado.

Mercedes Castillo, presidenta del CDP, indicó que Vianco Martínez fue sacado violentamente del Teatro Nacional por miembros de la seguridad del empresario Saymon Díaz (Centauro Segurity Group), luego de habérsele prometido una entrevista con el cantante canario Pedro Guerra.
El caso será conocido este martes a las 9:30 en la Fiscalía situada en el Palacio de la Policía Nacional (Leopoldo Navarro) a partir de una querella de Martínez. El CDP ha puesto a sus abogados a disposición de Martínez.

“Estaremos acompañando a Vianco Martínez mañana en la Fiscalía e invitamos a los periodistas a acompañar a Vianco en su querella contra Rafael y Josué Vargas, señalados como las personas que lo sacaron violentamente del Teatro”, se indica en el comunicado del CDP.

Sobre el caso de Alicia Ortega, el CDP indica que ésta difundió un reportaje, basado en querellas presentadas en la propia Fiscalía del Distrito, sobre una empresa que prometía empleos y que supuestamente no honraba ese compromiso, ofreciéndoles a las personas solicitantes que se convirtieran en vendedoras de la misma.

“Aun cuando Alicia Ortega no es miembro del CDP, es una periodista radicada en el país y que mantiene una conducta profesional seria e inobjetable frente a los temas que trata. Hemos estado ya en la primera audiencia de conciliación y la estaremos acompañando en lo que sea necesario”, indica la presidenta del gremio profesional.

Mercedes Castillo indica que no menos grave son las amenazas de muerte que está sufriendo el corresponsal Manuel Antonio Vega, de Hato Mayor, por parte de narcotraficantes, algunos de los cuales han sido liberados por jueces de esa localidad.

“En este caso está en juego la vida de un comunicador responsable el cual actualmente corre serio peligro debido a que en Hato Mayor parece que la correlación de fuerzas, está favoreciendo la delincuencia y el narcotráfico”, dice la declaración autorizada por la asamblea ordinaria del CDP del pasado sábado.
La presidenta del CDP advirtió que las autoridades judiciales y policiales en cada uno de estos casos, deben adoptar las medidas necesarias para que la justicia haga justicia (caso de Vianco Martínez) y que esa estructura no sea utilizada como un mecanismo de intimidación (caso de Alicia Ortega) y que se garantice la vida y el ejercicio periodístico de Vega, en Hato Mayor.
*Federación Latinoamericana de Periodistas

El ser desconocida...



Un artículo escrito hace diez meses por Yaniris López* en su blog Leer, vivir..., a propósito del atropello contra el periodista Vianco Martínez.


jueves 4 de septiembre de 2008

De todos los que conozco, pocos periodistas hacen valer el oficio de una forma tan gallarda como cierta persona. Pocos mantienen ese espíritu que la enaltece sin pisar la sala de redacción. Pocos se entusiasman tanto con una historia sencilla y la convierten en una obra de arte. Pocos se atreven a ponerle peso a su palabra aunque eso represente que le vuelen el pescuezo. Pocos se entretienen en la salita de lectura de una librería con un libro de “cualquiera” en las manos. Pocos son tan diligentes, tan prestos a ayudar, tan abiertos a todas las ideologías. Pocos tienen ese verbo fresco que convierte el texto en una lectura fina, selecta, sincera... Es un lujo tenerlo como amigo. Es un lujo que nos represente. Es un lujo que sea dominicano. Es un lujo conocer a Vianco y escuchar sus historias. Un lujo. “El ser desconocida no le impide a la verdad ser verdadera”. Pueden golpearlo, mandarlo a la mierda. Nada de eso importa. Nadie podrá quitarle su impronta de hombre grande. Los que “manejan” el país no lo saben porque el dedo y medio que tienen de frente lo usan para manipular, enfundar y alienar la tan repetidas veces burda y exigua inteligencia del dominicano. Ojalá, algún día, ese nacionalismo que tanto prefesan valga tanto como la palabra, el arrojo y la hombría de Vianco...

http://yanirislopez.blogspot.com/2008/09/el-ser-desconocida.html
*Yaniris López es periodista de Listín Diario

jueves, 23 de julio de 2009

Los hilos del poder y la agresión contra Vianco Martínez

Por Edwin Ruiz*

El 23 de agosto de 2008 Vianco Martínez fue agredido salvajemente por Rafael E. Vargas y Juan M. Vargas, dos espalderos al servicio del empresario Saymon Díaz.

El meritorio periodista, sentado en un lugar público, en una de las antesalas del Teatro Nacional, esperaba para realizar la entrevista que le había concedido el cantautor español Pedro Guerra.

Pero contra toda lógica, contra toda razón y fuera de toda proporción, fue agarrado por el cuello, encañonado, golpeado y arrastrado hasta las afueras del Teatro Nacional. Este acto salvaje e ilegal fue “negado” por el empresario Saymon Díaz de la forma más cantinflesca posible, al afirmar que el periodista no fue agredido sino que sus esbirros lo “sacaron forzosamente”.

Desde ese hecho bochornoso ha pasado casi un año, en el que Vianco fue repetidamente al Ministerio Público a pedir justicia, en el que extrañamente cuatro fiscales adjuntos que llevaron el caso fueron removidos, en el que la Fiscalía del Distrito, y su fiscal Alejandro Moscoso Segarra emiten un edicto viciado con el que deniega justicia al reportero, y en el que esa misma fiscalía desacata la sentencia de la jueza de instrucción Elka Reyes Olivo, dada a finales de febrero pasado, donde se le ordena seguir con las investigaciones de la acción en contra de Rafael Emilio Vargas y Juan Manuel Vargas Andújar.

Los hilos del poder que garantizan la impunidad para estos espalderos, acusados de una agresión tan burda y a los ojos de todos los presentes, y que ocultan la responsabilidad del empresario que les paga y les ordena, son partes de un misterio. Ante estos hechos, sólo se puede repetir la pregunta que se ha hecho el periodista: “¿Los espalderos de Saymon Díaz están por encima de la ley?”.

Con la agresión a Vianco se han abierto las compuertas de la infamia, se ha destapado la caja de Pandora, desde donde todos los males y abusos contra los periodistas dominicanos están permitidos. Solo basta tener dinero para comprar conciencias, incluyendo las de seudo periodistas pagados, y tener conexiones y amigotes en el Poder, para salir airosos e impunes.

“El día más triste de este país va a ser el día que los periodistas no puedan realizar una entrevista con garantías de que no van a ser pateados por espalderos con pistola”, reflexiona Vianco Martinez, con su rabia y dolor contenidos.

Es momento de que todos los periodistas dominicanos y dominicanas reflexionen también, y con la rabia contenida, empujemos todos para que al ejercicio de informar a la sociedad se le devuelva la dignidad y el respeto que todo estado de derecho debe garantizar.

Pero ese reclamo y esa acción solo lo pueden emprender los buenos y las buenas periodistas, que tal como afirmó Ryszcard Kapuscinski, sólo lo pueden ser “las buenas personas”. *

*Edwin Ruiz es periodista de Economía del semanario Clave.

¿A qué se debe este bochornoso y deliberado silencio de la justicia?


El caso que Vianco Martínez y el periodismo no arrodillado libra contra los espalderos de Saymond Díaz ha caído en mutis total por parte de las autoridades judiciales.

La impunidad en la que pretenden caiga el ¿proceso? no es nueva. Hoy que se cumplen once meses del atropello, publicamos aquí un artículo de Vianco en el que se cuestionaba, en los primeros meses, si los espalderos son un poder que se impone por encima de la ley.

Ahora cabría preguntarse: ¿A qué se debe este bochornoso y deliberado silencio de la justicia?

¿Los espalderos de Saymon Díaz están por encima de la ley?

POR VIANCO MARTINEZ
Symon Díaz, empresario artístico cuyos espalderos ultrajaron al periodista Vianco Martínez.Fueron citados el 23 de septiembre y no fueron. Volvieron a ser citados el 26 de septiembre y tampoco fueron. Y el pasado lunes 1 de diciembre, citados por el fiscal adjunto Carlos Manuel Hernández, tampoco acudieron.

De algún lado están sacando los nombrados Rafael Emilio Vargas y Josué Vargas, los espalderos del cuestionado empresario Saymon Díaz, el poder de burlarse de la justicia y de lograr que el Ministerio Público no los haga acudir con los mecanismos que contempla la ley para la gente que, como ellos, se declara en rebeldía.

Después de leer el artículo 100 de la Ley 76-02 Código Procesal Penal, alguien tiene que dar una explicación frente a una desidia que ya se parece a la denegación de justicia.

“Cuando el imputado no comparece a una citación sin justificación, se fuga del establecimiento donde está detenido o se ausenta de su domicilio real con el propósito de sustraerse al procedimiento, el ministerio público puede solicitar al juez o tribunal que lo declare en rebeldía o dicte orden de arresto”.

La pregunta es: ¿Están los espalderos de Saymon Díaz por encima de la ley”.

Primera información sobre el atropello


El periódico Listín Diario fue el primero en publicar la información de que los espalderos de Saymond Díaz cometieron un atropello contra Vianco Martínez en el Teatro Nacional, una noche en que el periodista esperaba para hacerle una entrevista al cantante Pedro Guerra.

Han pasado once meses de aquella agresión al libre desempeño del periodismo dominicano. La justicia hace silencio, pero la verdad grita lo que la complicidad calla.

Aquí está ese primer texto, firmado por Ramón Urbáez. La versión original se encuentra en el enlace: http://www.listindiario.com/app/article.aspx?id=71072



EN TEATRO NACIONALPeriodista Vianco Martínez denuncia agresión
Ramón Urbáez - 8/24/2008



SANTO DOMINGO.- El periodista y escritor Vianco Martínez, informó que fue agredido anoche por dos miembros de la seguridad del empresario artístico Symon Díaz, que lo sacaron a patadas y empujones del Teatro Nacional, donde el periodista intentaba obtener una entrevista con el artista español Pedro Guerra.

Martínez explicó que se dedica a realizar entrevistas con personajes destacados del arte y la literatura, y que desde el Hotel Hilton conversó con Guerra y su acompañante de nombre María, quienes le prometieron que podrían verse en el Teatro Nacional, antes de los ensayos para una presentación que el cantante tendría por la noche.

Según Martínez, llegó hasta el lugar indicado y conversó nuevamente con la asistente de Guerra y que ésta le dijo que esperara a que el invitado terminara con una entrevista para la televisión.

Fue en ese momento cuando de repente un agente de la seguridad de Symon Díaz, que se identificó con el nombre de Rafael Vargas, le conminó que saliera del Teatro, le arrebató el teléfono celular y su grabadora y los estrelló en el piso.

Luego otro espaldero de Symón le rompió el cuestionario lo agarró por el cuello, le retorció el brazo derecho y lo sacó arrastrándolo hasta el parqueo, donde lo habría pateó varias veces.

El artista Guerra ensayaba para su presentación en el Teatro Nacional al momento en que Martínez habría sido agredido por guardaespadas del referido empresario artístico.

Carta pública de Vianco sobre la agresión


Esta es mi respuesta a la cantinflada de Saymon Díaz y sus espalderos (27-08-08)

"El día más triste de este país va a ser el día que los periodistas no puedan realizar una entrevista con garantías de que no van a ser pateados por espalderos con pistolas"

He escuchado al empresario Saymon Díaz decir que sus espalderos Rafael Vargas y Josué Vargas no me agredieron, sino que me “sacaron forzosamente”, y antes esta petulante cantinflada quiero dejar constancia de los detalles de aquella infamia injustificada.


Siendo las cuatro de la tarde del sábado 23 de agosto, me dirigí al hotel Hilton, donde se encontraba el cantautor Pedro Guerra. Lo encontré en el área del lobby junto a su esposa y manager de nombre María. Después de explicarle el interés de que me concediera una entrevista, Guerra me propuso que fuera al Teatro Nacional para hacerla, debido a que acababa de llegar del aeropuerto, procedente de Costa Rica e iba a descansar.

Según lo conversado, llegué a las siete al Teatro Nacional. Ya en la Sala Principal encontré que Luz García realizaba una entrevista con el cantante y me senté a un lado de la sala a esperar. Converse en ese momento con la esposa y manager del artista, quien me pidió que esperara un momento a que el artista terminara la entrevista e hiciera el chequeo de sonido. Le dije a la señora Maria que tenia mucho interés en la entrevista, pero que si las cosas se complicaban con el tiempo y no se podía realizar, lo entendería.

Cuando Guerra terminó la entrevista, salio del área de la sillería, momento en que, ya junto a el, la señora María me hizo una seña para que esperara. Así lo hice. Minutos después llego hasta mí un sujeto que se identificó como Jefe de Seguridad del Teatro y de nombre Rafael Vargas. (Después me enteré que no era personal del Teatro Nacional, sino un espaldero con pistola de Centauro Segurity Group contratado por Symon Díaz).

Me preguntó en tono violento qué buscaba sentado allí y le conté la historia de la entrevista. No me dejó hablar. Cada vez que trataba de explicarle el asunto, me interrumpía en tono violento. Le pedí que no se alterara para resolver la situación. Me respondió que no estaba alterado, pero esa respuesta me la dio más alterado aun. Le dije que iba a llamar a Symon Díaz para que resolviera la situación, lo cual hice tres veces, pero no me respondió. Le dije que iba a llamar a alguien mas, a una persona que conoce a al sr. Symon Díaz y que podía ayudar a poner fin a la situación. Cuando la contacté, le pasé el teléfono a Rafael Vargas, pero lo que hizo fue coger el teléfono, cerrarlo violentamente, lanzando una colección de improperios entre los cuales el más decente era "tu lo que eres es un comemierda".

Me dijo que los periodistas estaban prohibidos en ese lugar y que él, como Jefe de Seguridad, iba a hacer valer "como sea" esa prohibición. Le recordé que allí, minutos antes, había una comunicadora realizando una entrevista, lo cual vi que hizo con mucho profesionalismo. Fue entontes cuando me dijo que él me iba a sacar de alli a patadas.

Procedió a llamar por la radio a otro miembro de la seguridad (Josué Vargas), quien vino en un tono más agresivo aun. Sin mediar muchas palabras, tras recibir la orden de Rafael Vargas, me agarró por el cuello en tono violento, y con mucha violencia me paró del asiento, me sacó al pasillo de la sala y allí, con su mano derecha apretándome por la nuca y retorciéndome el brazo izquierdo sobre la espalda, me arrastró como un animal desde la sillería de la sala, hasta la puerta del parqueo que da a la calle Pedro Henríquez Ureña.

En el trayecto, pasamos por una parte de la recepción y por el pasillo del lado que da a esa puerta, todo eso en forma violenta.

Imagínense el triste espectáculo de Vianco Martínez arrastrado como un perro por estos sujetos a la fuerza delante de la gente que llegaba al concierto. ¡Sólo imagínenselo!

Nunca podemos olvidar que lo único que yo buscaba era una entrevista, la cual había coordinado debidamente. Yo no estaba allí haciendo nada indebido, nada ilegal, yo no estaba robando, no estaba maltratando a nadie, no le estaba faltando a nadie, no estaba alterando el orden. Es muy triste todo lo que sucedió el sábado, toda la humillación, todo el ultraje, todo el maltrato físico!

El día mas triste de este país va a ser el día que un periodista no pueda realizar una entrevista con garantías de que no sera pateado ni ultrajado por espalderos con pistolas.

Como nota paradoja, la mañana de ese mismo día realice
una interesante entrevista al renombrado músico cubano
Paquito D Rivera –que es un caballero tratando a los periodistas que quieren escuchar su historia-, y por hacerla nadie me fue encima, nadie me humilló ni me arrastró ni pateó.

Vianco Martínez